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“Nada en la vida debe ser temido, sino entendido”. Con esta frase de Marie Curie (dos veces Premio Nobel) quisiera expresarme hoy, celebración del Día Internacional de la mujer trabajadora, de la mujer feminista, de la mujer científica, de la mujer madre, de la mujer que debe ocupar sin más demora el puesto que le corresponde en igualdad de condiciones al hombre.
Nuestra sociedad ha hecho grandes avances en materia de igualdad y que conviene recordar para desde esa base consolidada seguir creciendo en derechos y salvaguardando los progresos conseguidos y que ya se han hecho afortunadamente irrenunciables para nuestra sociedad.
En Marruecos, la situación de la Mujer es una prioridad de Su majestad el Rey Mohamed VI. La voluntad real de construir una sociedad moderna y democrática ha permitido a la mujer marroquí ejercer plenamente sus derechos en todos los ámbitos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales.
Esta voluntad Real, trasladada al ámbito parlamentario y unida a una sociedad que avanza cada día en su desarrollo y en la modernización del país, han hecho posible estos notables avances en la promoción de los derechos de las mujeres acercándolas cada día mas a planos de igualdad que exige una sociedad avanzada.
Desde su acceso al Trono en 1999, Su Majestad el Rey Mohammed VI ha apoyado las demandas de las mujeres y ha liderado un proceso de modernización de su estatus. Destacó en varios de sus discursos la necesidad de promover el papel de la mujer y fomentar su participación en los centros de toma de decisiones. Desde la creación del Código de Familia en 2004, se han logrado avances importantes. La Constitución de 2011 dio un gran paso adelante al prohibir todas las formas de discriminación. En el preámbulo se proclama que “el Reino de Marruecos se compromete a prohibir y combatir toda discriminación contra cualquier persona por razón de sexo”. Esto consagra en su artículo 19 la igualdad entre los dos sexos.
Además, Marruecos ha ratificado varias convenciones internacionales para la protección de los derechos de la mujer, incluida la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW) y el Pacto de derechos económicos y sociales. Sin olvidar el proyecto de ley de lucha contra la violencia contra la mujer. La Moudouwana o el código de familia ha realizado cambios sustanciales en términos de los derechos de la mujer, entre otros, fijando la edad mínima para contratar matrimonio a los 18 años, también otorga el derecho de tutela a la mujer sobre sí misma. Ya no necesita un tutor para casarse o viajar.
Estos cambios ya han dado sus frutos. Si en cada gobierno tenemos ministras, secretarias de Estado, embajadoras … que no es el caso de muchos otros países musulmanes, la paridad y la igualdad entre hombres / mujeres todavía tiene un largo camino por recorrer. No olvidemos señalar que Marruecos opera a dos velocidades.
Este Código de Familia, adoptado en 2004, otorga a la mujer marroquí un mejor estatus social y dio un fuerte impulso al proceso iniciado por Marruecos para la construcción de una sociedad democrática y moderna y para promover y consolidar la noción. de la “familia” y la protección de los menores. Consagra el principio de igualdad entre mujeres y hombres en el nivel de responsabilidad familiar, los derechos y deberes de ambos esposos y preserva los derechos del niño al incluirlos en las disposiciones del Código de conformidad con las convenciones internacionales ratificadas por marruecos.
Desde entonces, se han dado varios pasos positivos. Y esto tanto en el campo político, con la introducción de cuotas para las elecciones, y mediante la multiplicación de los nombramientos de las mujeres a cargos de responsabilidad. En este sentido, la Constitución de 2011, como ley suprema del país, ha otorgado un lugar destacado a la participación de las mujeres en la vida política, dado su papel como palanca para la democracia, a través de la implementación de lugar de principios, mecanismos y autoridades capaces de alcanzar el principio de paridad y permitir que hombres y mujeres disfruten, en pie de igualdad, los derechos y libertades de una sociedad civil, política, económica, social, cultural, ambiental y también a través de la promoción de la igualdad de oportunidades para hombres y mujeres en el acceso a las elecciones
En el plano social, el Rey ha hecho de la integración de las mujeres, especialmente las de entornos desfavorecidos, en los circuitos económicos y la mejora de su condición social una prioridad estratégica.
La experiencia en el campo ha demostrado que incluso las mujeres educadas (especialmente en el mundo rural) solo pueden cambiar su perspectiva sobre la vida y el matrimonio si son económicamente independientes. Por lo tanto, la acción real se ha fijado el objetivo de ayudarlos a desarrollar una actividad generadora de ingresos en una visión de una economía sólida que combine el desarrollo humano y la promoción de productos locales. Acceso a cooperativas, agricultura orgánica, artesanía … El financiamiento está asegurado, entre otras cosas, por un programa de desarrollo rural por valor de 55 mil millones de dirhams.
Con este fin, todos los proyectos lanzados en todo el Reino, en colaboración con la Fundación Mohammed V para la Solidaridad o la Iniciativa Nacional para el Desarrollo Humano, demuestran el constante deseo de equipar a las mujeres con los medios y herramientas para Integración socioeconómica que les permita participar activamente al desarrollo de su país. Los Centros para la educación y capacitación de mujeres, aquellos para la capacitación y el fortalecimiento de las habilidades de las mujeres, y otros para madres en dificultades, fueron inaugurados por Su Majestad el Rey para asegurar una mayor estabilidad social y Integración económica exitosa.
Yo soy de los convencidos de la importancia que tiene la aportación al desarrollo y crecimiento de una sociedad cuando crecemos juntos en deberes y derechos y eliminamos las desigualdades.
La humanidad no se puede permitir tener:
- 750 millones de niñas casadas antes de cumplir los 18 años de edad
- 200 millones de niñas que sufren mutilación genital.
- Que en 18 países los maridos impidan legalmente trabajar libremente a las mujeres.
- Que en 49 países no existan leyes de protección hacia las mujeres.
- Que 1 de cada 5 mujeres sean víctimas de violencia de género.
- Que solo el 23 % de las mujeres son parlamentarias.
- Que solo el 13 % tienen tierras en propiedad.
Y ya si pasamos al dato más dramático de la violencia, el asesinato de mujeres, creo que a nadie nos surgen dudas de que esto es insostenible en un mundo en el que debe imperar la Justicia social y la defensa de los derechos humanos por encima de cualquier otro valor.
Codo con codo, hombres y mujeres, pueden luchar de forma unida, pero ante todo convencidos, de que la igualdad nos enriquece como sociedad y nos hace crecer hacia metas más altas como modelo a seguir y desarrollar para futuras generaciones.
Yo quisiera llegar a un utópico hoy, pero posible día 8 de marzo, donde de verdad sea una celebración de mujeres y hombres que han hecho posible acabar con una discriminación que afecta al 50 por ciento de la humanidad.
Ese día habremos ganado no una batalla, sino todo un reto para el futuro de ese 50 % que no deberíamos olvidar que son nuestras madres, nuestras hermanas, nuestras abuelas, nuestras hijas, nuestras compañeras!
Y no se olviden que Nada en la vida debe ser temido, sino entendido !!!
Saloua BICHRI
Cônsol General de Marruecos en Tarragona,. Lleida y Aragón
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