COMUNICAT

Los Puertos están en conflicto. La normativa Europea y el Tribunal de Justicia Europeo han provocado un gravísimo conflicto con los estibadores portuarios, que luchan por mantener su estatus.

La inacción durante años y las prisas actuales, pretendiendo imponer una solución por Real Decreto, han encendido a los trabajadores de la estiba. La convocatoria de huelgas a partir de marzo no es lo más grave, sino el hecho de que ya hace tiempo que han reducido drásticamente la productividad, disminuyendo su ritmo de trabajo con una huelga de celo que puede prolongarse de forma indefinida.

Paralizar los Puertos es gravísimo, afecta a todos los sectores económicos, y es un auténtico desastre para las empresas radicadas en entornos de un gran Puerto como el de Tarragona, con pérdida  de negocio y con un coste en forma de puestos de trabajo.

Especialmente dramático es el caso del transporte. Cada día más de 2.000 camiones entran y salen del Puerto de Tarragona. Con ellos se posibilita un enorme tráfico de productos garantizando los suministros para nuestro consumo, tanto personal como industrial y comercial. El sector del transporte pide disculpas a todos sus clientes por los perjuicios que inevitablemente se están causando, a pesar de que están dispuestos a efectuar un máximo esfuerzo para minimizar sus consecuencias.

Cada día que se paraliza la flota de camiones, o que se trabaja al ralentí, los transportistas padecen pérdidas irrecuperables. Además los transportistas que realizan trabajos con base en los Puertos son básicamente autónomos y PIMES, que por su reducido tamaño no pueden soportar por largo tiempo las consecuencias de un conflicto, ni deseado ni buscado.

Desde FEAT, como entidad representativa del sector del transporte en el Camp de Tarragona, no podemos sino exigir entendimiento a los estibadores, empresas consignatarias y Gobierno de España, pues no podemos continuar así. La prudencia obliga a todas las partes pues, de una parte, el cumplimiento de la norma europea es inevitable y por tanto existe una inexcusable necesidad de acuerdo, por lo que es  incomprensible la actual situación de bloqueo que provoca, entre otros efectos, la ruina de nuestras empresas de transporte.

Tarragona, 24 de febrero de 2017