RICARD CHECA
La aplicación de mensajería instantánea WhatsApp, la más popular del mundo y propiedad de Facebook, ha anunciado que retrasa la entrada en vigor de sus nuevas condiciones de uso, de las que se había difundido que supondrían compartir contactos con la red social Facebook. Y ante la difusión de “bulos”, según la empresa, que han supuesto la pérdida de miles de usuarios, han decidido posponer la entrada en vigor de las nuevas funciones, que suponen obligatoriamente un cambio en las condiciones de uso para aquellos que tengan la aplicación instalada.
Y, sostienen, que no van a suspender ninguna cuenta el próximo 8 de febrero, entre otras cosas porque la aceptación de las nuevas condiciones de uso se pospone al 15 de mayo. En cualquier programa informático sujeto a copyright, la no aceptación de las condiciones de uso -que es el contrato que liga al proveedor de servicios con el cliente- supone la ruptura del servicio, y por tanto que no se pueda usar el programa. Aunque habitualmente, eso se firma al principio y las revisiones son casi automáticas.
Facebook ya tuvo casi un motín de usuarios cuando integró sus servicios y añadió a la interfaz de Whatsapp el lema “Whatsapp from Facebook” y ofreció la opción de aceptar o no esta integración. Y ha tenido serios encontronazos con las autoridades de competencia europeas cuando ha intentado aplicar la integración por la vía rápida.
Los responsables de Whatsapp, que forma parte del grupo de empresas de Mark Zuckerberg junto a Instagram y Facebook, han asegurado que las nuevas condiciones de uso que quieren que los usuarios acepten se refieren al uso de Whatsapp Business, una funcionalidad pensada para empresas que existe desde el 2018. Las nuevas normas, que incluyen funciones como integrar el uso de Whatsapp en Instagram y Facebook para empresas.
Utilizan Whatsapp como sistema incluso de videoconferencia para asesorar compras, desde su página web, o directamente con llamadas del cliente interesado. Como muchos de esos negocios tienen tienda en Instagram o Facebook -razona la compañía en su blog- supone que si el usuario tiene una de esas dos redes sociales, pueda conectar automáticamente con Whatsapp.
¿Supone esto que Faceboook acceda forzosamente a los contactos de Whatsapp? Está por ver, pero en su post la compañía desmiente que esto vaya a suceder y que suponga “ampliar la habilidad de compartir datos con Faceboook”. La publicidad que sustenta tanto Instagram como Facebook ya comparte esos datos, una función que sus usuarios aceptaron en el 2017. Pero todos los usos de Whatsapp posibles se basan en la gestión de la agenda de contactos del usuario.
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REDACCIÓ
