CARLES CASTILLO: ‘Aprendices de brujo’

  Pegado a la pantalla de mi televisor estuve durante la emisión del magnífico documento audiovisual de Jordi Évole en la Sexta entrevistando al etarra Iñaki Rekarte. La rudeza de las preguntas y la crudeza de las respuestas nos deben hacer reflexionar y no perder de vista ni de dónde venimos ni hacia dónde queremos ir o nos quieren llevar.

Y es que los que tenemos siempre en nuestra memoria política y emocional pérdidas como la de nuestro compañero Ernest Lluch a manos de la sin razón de una causa que tan terriblemente explicaba el programa de Évole, no podemos bajar la guardia. Los demócratas no podemos relajarnos ni un minuto ante la atrocidad del terrorismo.
Pero no todos piensan como yo. Un ejemplo inaudito lo estoy viendo en Els Pallaresos. Hace pocas semanas tuve la satisfacción de que me invitasen a presentar la lista electoral del PSC al 24 de mayo. Y en las últimas fechas atiendo perplejo a la polémica que ha desatado el alcaldable de CiU de dicho municipio.
El candidato de CiU se llama Josep Nolla. Y en una fotografía publicada en facebook aparecía con un cartel en el que se leía FREE OTEGUI, junto a un militante abertzale. Posteriormente esta foto ha sido rescatada por los medios de comunicación y en las redes sociales.
La reacción de Nolla ha sido, primero, reafirmarse en la reivindicación de pedir la liberación de Arnaldo Otegui. Segundo, definirlo como preso político. Tercero, concluir que su postura es muy lógica, pues ambos comparten ideal independentista y, por último, alardear de que nadie de la dirección de CiU le ha llamado la atención por este tema. Suma y sigue.
Desconozco si Nolla vio el programa de Évole, si sabe quién fue Ernest Lluch y si conoce de algo a Arnaldo Otegui. Pero como demócrata y defensor de las libertades no puedo dejar pasar este asunto sin antes decir algunas cosas.
Lo primero es que, ciertamente, repasando la hemeroteca de estos días, nadie de CiU ha reprendido a Nolla públicamente y, a tenor de la actitud desafiante del candidato convergente de Pallaresos, ni tan si quiera le han llamado la atención en privado.

Cabe deducir que Nolla no miente y que, ciertamente, la formación que tiene sus sedes embargadas por un juez y a su insigne fundador dando cuenta de sus cuentas en Andorra y Suiza, ahora deberemos sumarle sus lazos fraternales con el mundo abertzale, incluso con el infra mundo abertzale.
En segundo lugar debo decir que la normalización de Euskadi y la reintegración de los presos que cumplieron condena por su apoyo o vinculación a ETA es un objetivo asumido por nuestra democracia, asumido con dolor y, en ocasiones, rabia contenida, pero no obstante asumido. Pero tal cosa nada tiene que ver con la liberación de Otegui y, mucho menos, con el marco de convivencia democrática que siempre ha imperado en Catalunya. Algo de eso se está torciendo. Algo de eso lo están torciendo manifestaciones como las de Nolla y la pasividad de la formación política que le da amparo.
Lo que nos viene a decir Nolla es terrible:”Si eres independentista encarcelado, entonces eres un preso político, o sea, eres de los nuestros”. Nolla viene a representar aquello que Rekarte explicaba marmóreamente a Évole, que la causa lo justificaba todo. Incluso es Nolla quien dice en su propio muro que una cosa es defender a Otegui y otra defender el terrorismo en sentido estricto y cito textualmente.
Y cuanto más repaso las réplicas de Nolla al aluvión de críticas que le están cayendo más me preocupo por ese ensimismamiento y enquistamiento del independentismo catalán frente a todo aquello que no sea él mismo y su causa.
Los catalanes hemos padecido en nuestras carnes la espeluznante narración de Rekarte, por eso le pediría al señor Nolla y los suyos que se abstengan de hacer de aprendices de brujo.

Carles CASTILLO
Primer secretari de la Coordinadora Comarcal del PSC