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Sorprende que ahora algunos se rasguen las vestiduras con todo lo que está sucediendo entrono a BCN World, cuando hace unos meses se hizo público que en las negociaciones entre Junts pel Sí y la CUP para la investidura del President de la Generalitat se había puesto como “moneda de cambio” paralizar el citado macro proyecto.
Pero la investidura pasó, y las promesas de miles de puestos de trabajo siguen en el aire, y cuando se dan cuenta de que la decisión adoptada no es la esperada por los ciudadanos optan por evadir responsabilidades, pretendiendo trasladar a la ciudadanía lo que deberían ser decisiones políticas. Y que mejor forma que volver a reivindicar “el dret a decidir” para convocar un referéndum en el que los políticos de turno puedan difuminar sus responsabilidades.
Y por si eso no fuera suficiente, no trasladan el debate a una estricta cuestión de BCN World sí o BCN World no, sino que se “entretienen” en discutir si el supuesto referéndum debe circunscribirse únicamente a las localidades afectadas o por el contrario debe realizarse en toda Cataluña, y mientras ellos “marean la perdiz”, todos vemos atónitos como lo que era una oportunidad se va transformando en un fracaso.
Que a estas alturas de la película CDC-Junts pel Sí-Democràcia i Llibertat, o como se llamen, pretendan responsabilizar de esta situación a ERC y la CUP me parece cuanto menos patético. Esos dos partidos nunca han ocultado su rechazo al proyecto, sin embargo CDC ha optado por gobernar con ellos, anteponiendo intereses partidistas al interés general.
Y curiosamente, los alcaldes de los municipios más afectados por ese proyecto, Salou y Vila-Seca, alzan la voz y pretender enarbolar una bandera en defensa del mismo, pero se “olvidan” de que ha sido precisamente su partido, Convergència Democràtica de Catalunya, el que ha jugado con fuego, y ahora, se rasgan las vestiduras.
Mario GARCÍA
Portavoz del Grupo Municipal del PP de Salou
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