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La primera ministra británica, Liz Truss, ha anunciado su dimisión 44 días después de jurar el cargo. Pasará a la historia como la jefa de Gobierno más breve en toda la historia del Reino Unido. “No puedo cumplir el mandato para el que me eligieron. He anunciado al rey mi decisión de dimitir”, declaraba en una comparecencia este mediodía a las puertas de Downing Street. Su sustituto será elegido durante esta semana, si bien la oposición reclama elecciones anticipadas.
En este mes y medio de mandato, Truss ha logrado ponerse en su contra a la mayoría de su partido, al Banco de Inglaterra, a los principales agentes económicos del país y a casi toda la opinión pública. Será recordada por impulsar una rebaja fiscal de más de 60.000 millones de euros, una medida que jamás llegó a cumplirse gracias a las presiones de todo el ecosistema político y económico. La todavía primera ministra incluso llegó a pedir perdón al electorado británico.
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