El Obispado de Sant Feliu de Llobregat ha apartado a un cura adscrito en la Parroquia de Santa Maria de por “presuntas conductas impropias” con menores fuera del recinto y de las actividades parroquiales.
En un comunicado este viernes, ha explicado que, al tener conocimiento del caso, ha prohibido que ejerza su ministerio sacerdotal para que “se preste a iniciar el correspondiente proceso canónico interno”.
Ha manifestado su “consternación y tristeza” por el presunto caso, ha condenado cualquier conducta de estas características y ha manifestado su apoyo a las víctimas y familiares que pueda haber.
Desde el Obispado han querido remarcar que se aplican protocolos de prevención previstos para este tipo de casos, como el servicio de atención a las víctimas de abusos, y la obtención del certificado negativo de delitos sexuales el Ministerio de Justicia por parte de todos aquellos que se relacionan habitualmente con menores.
Está completamente “a disposición de las autoridades pertinentes para colaborar con la justicia de manera abierta y franca”, y ha subrayado su compromiso con la protección y la custodia de jóvenes y niños.