25. Abril 2024

Arxius de Senador | Diari La República Checa

REDACCIÓ18 Novembre, 2020
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¡La verdad! en la mayoría de casos no deja de ser un tema cuestionable, por aquello que muchas veces hemos oído hablar: es tu verdad que no la mía, te crees en la posesión de la verdad, no existe una verdad absoluta, la verdad es relativa o como muy bien la definía Ramón de Campoamor cuando decía “que en este mundo traidor, no hay verdad ni mentira, todo es según el cristal con que se mira”.

En ese quehacer lleva tiempo sucumbido el gobierno social comunista de Pedro Sánchez, en cuanto a dirimir cuáles son las informaciones falsas y cuáles no, eso sí, sin detallar los criterios que va a utilizar, por si acaso, justificándose en los bulos que se hacen noticia en las redes sociales, pudiendo dañar la imagen del gobierno, pero en especial la suya propia, quizás la excusa del bulo, sea el motivo para intentar fiscalizar los medios de comunicación, sometiéndoles al control de sus noticias, que no deja de ser una censura encubierta, atentando contra la libertad de expresión y el pluralismo mediático, en resumidas cuentas, es atentar contra uno de los principios fundamentales de un estado de derecho, como es la libertad de expresión que recoge la Constitución Española.

Este intento de intromisión en la libertad de información, se ha bautizado como el “Ministerio de la Verdad”, recogida en el Boletín Oficial de Estado (BOE) el pasado 5 de noviembre que, reserva al Ejecutivo la potestad de determinar qué informaciones son erróneas y las que no, poniendo al frente de la misión, a su jefe del gabinete de presidencia, persona encargada de las campañas mediáticas del gobierno social comunista de Pedro Sánchez, con ello, queda clara su capacidad de “objetividad” y “parcialidad” a la hora de juzgar la verdad de las informaciones, estamos más ante un “Misterio de la Verdad” que no la de un “Ministerio de la Verdad”. La pregunta surge si ante la puesta en marcha de la “máquina de la verdad”, si servirá también para detectar la verdad del gobierno. Quizás, la invención se le debe a Pablo Iglesias, en su afán de copiar del gobierno amigo bolivariano de Venezuela, un gobierno de la mentira que ha creado un “Ministerio de la Verdad”, para acabar con la disidencia en los medios de comunicación que no le son afines, ni tampoco le ríen las gracias a Maduro.

El “Ministerio de la Verdad” va a ser también capaz de fiscalizar las mentiras del gobierno social comunista de Pedro Sánchez, cuando por ejemplo, haciendo  referencia a la pandemia, informaba que se había aplicado la estrategia de la OMS para combatir el coronavirus, cuando no empezó a actuar hasta el 9 de marzo sabiendo que la OMS había declarado la alerta sanitaria internacional el 30 de enero, hablaba se habían hecho más test que “en ningún país del mundo” y que no hacia falta hacerse los test masivos, las cifras de fallecidos y contagiados dadas por el gobierno tuvieron que ser más tarde rectificadas a el alza, llegando incluso a decirse que las mascarillas no eran del todo necesarias, que se había vencido la pandemia después del confinamiento o las promesas de ayudas a autónomos o empresarios que con duras penas están llegando.

Alguien ha olvidado cuando Pedro Sánchez muy convencido y contundente manifestaba a un periodista de Navarra TV: “con Bildu no vamos a pactar. Se lo repito. Con Bildu no vamos a pactar…. si quieres lo digo 5 veces o 20 durante la entrevista”, añadiendo “nosotros tenemos una línea roja, que es la defensa de la Constitución Española”, de todo lo dicho no ha quedado nada de nada, hace pocos días los pro etarras de Bildu en boca de su dirigente Otegui, dijeron si los Presupuestos Generales del Estado, para gozo y disfrute de quien los negaba. En esa hipotética defensa de la Constitución de Pedro Sánchez, vuelve nuevamente a mentir, olvidándose de su artículo 3 cuando habla del uso de las lenguas en todo el territorio español, para entregar a los independentismos la supresión del castellano como lengua vincular en las administraciones educativas, a pesar incluso de muchos de sus votantes. Estos son algunos de los ejemplos en los cuales también el “Ministerio de la Verdad” tendría que actuar, ya que el gobierno de Pedro Sánchez también participa con sus campañas mediáticas en informaciones algunas de dudosa veracidad.

Rafa LUNA
Ex senador i diputat