El debate de ayer, entre los cuatro candidatos a la Presidencia del gobierno , dejó las cosas claras en cuanto a lo que puede suceder el 26J .
Rajoy defendió, mejor de lo que se le suponía, su nefasta actuación como Presidente. Es obvio que sus cuatro años de gobierno, han sido nefastos para la mayoría de los ciudadanos. La corrupción ha campado por sus anchas y su gestión económica, ha consolidado una estrategia basada en una sociedad cada vez más dual, donde los ricos son cada día más ricos y los pobres más pobres.
Ante este panorama, no caben medias tintas, ni medidas timoratas y excesivamente condicionadas por un pasado anterior, como le sucede al PSOE y su candidato Pedro Sánchez.
Es más, mientras en las elecciones de Diciembre, este Partido parecía realizar una mínima rectificación, proponiendo una derogación del nefasto artículo 135 de la Constitución, que prioriza el rescate bancario antes que el ciudadano, en estas elecciones no he escuchado en boca de dirigente socialista alguno, ninguna referencia a este importantísimo tema.
El pacto con Ciudadanos, la nueva y en nada disimulada formación derechista , auspiciada por el IBEX 35, tal y como era previsible está condicionando la campaña socialista. No hablemos ya del tema corrupción, donde el PSOE tiene difícil, por no decir imposible, dar lecciones a nadie. Ni siquiera al gobierno más corrupto de la reciente historia de España.
Con dos Presidentes, no ya de la Junta andaluza si no del propio Partido, lo cual agrava aún más el tema, encausados por el más voluminoso en cuanto a dinero, escándalo de todos los escándalos, caso ERES, es harto complicado dirigirse a Rajoy para denunciar su implicación en el barro y lodazal que le rodea.
Lo descrito anteriormente, no se trata de una apreciación subjetiva, si no de una evidencia contrastada en hechos sucedidos. Es ante esta situación de nula autocrítica en relación al pasado, por parte de los socialistas , que emerge con fuerza la coalición UNIDOS PODEMOS, como única alternativa de gobierno posible al PP , y sus políticas derechistas y reaccionarias en lo económico , social y de libertades .
Finalizado el debate, esta es mi opinión sobre los cuatro candidatos.
PABLO IGLESIAS: Se ha consolidado como líder político, ya no es solo el más brillante de los oradores, si no que afianza sus posibilidades de ser Presidente del gobierno a corto o medio plazo. Ha demostrado que es la única esperanza para un gobierno alternativo al PP. Muy sensato e inteligente , fue el único que se expresó con claridad , en algo tan importante como los pactos post electorales . Defendió como única alternativa a las injustas políticas de la derecha, un pacto UNIDOS-PODEMOS y sus confluencias más el PSOE. Una parte importante de la ciudadanía se lo agradecerá. Las ambigüedades e indefiniciones de otros pueden serles muy perjudiciales.
MARIANO RAJOY: Debatiendo es menos malo que gobernando. No es tan tonto como parece. Es obvio que la defensa numantina, que hizo de su gestión, evidencia que de gobernar el PP nada mejorará para la ciudadanía en general y para los trabajadores en particular.
ALBERT RIVERA: Ha ratificado lo que es, un peligrosísimo lobo, disfrazado de caperucita, pero defensor inquebrantable de los intereses de los de siempre. En esta ocasión se le ha visto demasiado la patita. Si llegara a Presidente, cosa que no pasará, podría ser aún más maligno que Rajoy.
PEDRO SÁNCHEZ: Siento decirlo pero será su último debate. No le niego que sea una buena persona, pero está preso de su propio Partido, varones y muchos militantes incluidos. Ningún tipo de autocrítica, sobre los graves errores del PSOE en el pasado.
Se equivocó de adversario, y en breve, será el Secretario General de la tercera fuerza política. Después posiblemente dimitirá, y si no le echarán. Lamentablemente quienes lo liquidarán políticamente, son aún peores que el propio Sánchez.
En su tejado, o en el de su sucesor o sucesora, está la pelota que dependiendo hacia que parte del campo la dirijan, PP o Podemos, finiquitará al PSOE como Partido de izquierdas o por el contrario, prolongará la vida de una organización centenaria, que aún tiene posibilidades, si es que quieren sus dirigentes claro, de recuperar una parte de la mucha credibilidad perdida. Veremos…….
Mariano PESCADOR