REDACCIÓ
Siguen las valoraciones de la oposición al primer año de gobierno en el Ayuntamiento de Tarragona. El principal partido de la oposición, el PSC tarraconense, que ha ostentado el gobierno de la ciudad durante doce años; ha lanzado un dardo envenenado al ejecutivo de ERC y En Comú Podem: “Ha sido un año perdido”.
La portavoz socialista, Sandra Ramos ha salido a la palestra consciente de que “ha sido un año marcado por las adversidades”, pero que no exime al gobierno municipal de “haber dejado perder las oportunidades de poder afianzar los diferentes proyectos de ciudad que se han vuelto a quedar en el tintero”.
“No es ninguna novedad que este gobierno es un gobierno en minoría y débil. A veces tan solo con 9 concejales no es suficiente. Más aún cuando se señala a los funcionarios y técnicos de la casa como principales culpables de la lentitud de la administración”, ha asegurado Ramos, sobre los problemas que aqueja el ejecutivo republicano.
El discurso de la portavoz socialista también se ha centrado en “desmontar”, las políticas de “balcón y bandera” de Ricomà y Aguilar, a los cuales también ha acusado de populistas, con la apertura del balcón municipal para las fiestas mayores, o la pancarta de apoyo a los presos políticos “que ha quedado colgada en un rincón”.
Ramos también ha cargado contra la decisión de la concejala de Turismo, Laura Castel, que “abandona el cargo dejando el área sin responsable en una de las campañas turísticas más importantes que se recuerdan” y también acusando al alcalde de “dejar perder la oportunidad de liderar el territorio”, dejando su escaño en la Diputación.
REDACCIÓ
