El cáncer es la tercera causa de mortalidad en España según el INE (20,4%), solamente superada por las enfermedades cardiovasculares e infecciosas (23% i 20,8%). El dato más relevante es que los diagnósticos de nuevos tumores han disminuido entre un 30%-40%, algo a lo que sin duda ha contribuido la pandemia. Con la llegada del coronavirus, muchas personas no han podido o querido acceder a sus pruebas rutinarias, afectando gravemente a los posibles cánceres.
Tanto es así que el retraso de un mes en el tratamiento oncológico puede aumentar la mortalidad en un 6-13%. Por ejemplo, en cáncer de mama el retraso del tratamiento de 8 semanas puede aumentar la mortalidad en un 17% y el retraso de 12 semanas puede hacerlo en un 26%. Y es que es vital detectar esta enfermedad a tiempo.