29. Març 2024

Arxius de PUNTO DE ENCUENTRO | Pàgina 2 de 2 | Diari La República Checa

REDACCIÓ11 Novembre, 2020
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Es preciosa. Su semblante es delicado con un blanquecino rostro, destacar no fue su punto fuerte. Insegura, su mirada despierta curiosidad a la vez que mil temores corretean alrededor de su retina.

Es preciosa. Discreta, más bien tímida, con un pasado enredado del cual no le gusta hablar, ella no lo sabe, pero es preciosa.

Entra diligente en su cuarto, su posición común es delante del espejo, donde puede ver su reflejo, ese que tanto detesta.

De pronto, aprecia una presencia en el interior de su cuarto desordenado.

Sus ojos se llenan de repulsión, a la vez que temor. Los cierra.

Abre de nuevo los ojos con ánimo de que la presencia se hubiera esfumado, pero sus deseos fueron nulos.

“¡Márchate! ¡No me gustas, te odio!

Las dos figuras se miran fijamente, con una mirada compacta, no muestran afectividad una por la otra, no se gustan, no se quieren.

Ella empieza a dibujar una línea con sus finos dedos alrededor del torso de su delgada figura, mientras llora afligida, se siente más corpulenta de lo que en realidad es, no le gusta su cuerpo.

La presencia , no la para de observar.

Cada vez que ella derrama una lágrima de impotencia, se une un tóxico vínculo entre las dos figuras.

De pronto, la presencia se apodera totalmente de la mente de la niña. No! No es real!

Sale del espejo en el que ella, preciosa, no paraba de mirarse, y se mete dentro de su cuerpo haciendo así, que ella caiga en un sueño profundo, tan profundo, como eterno.

Que oscuro trastorno es aquel que se mete dentro de nuestra mente, se convierte en nuestro estilo de vida, y nos compromete a vivir con ello hast eternamente.

Pero… ¿cuál es el punto de partida de esta enfermedad mental?

Acoso, abusos, maltrato, problemas familiares, maltrato doméstico, soledad…

La autoestima traiciona.

Sandra GONZÁLEZ
Escribe quinzenalmente

 


REDACCIÓ26 Octubre, 2020
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¿Qué ves cuando te miras al espejo? Nos han hablado tantas veces del amor propio que lo hemos normalizado, pero francamente, no lo hemos interiorizado.

Quererse y aceptarse es un camino hacia a la absoluta felicidad que pocas personas han saboreado con severa plenitud.

El amor propio no es solamente aceptarse a uno mismo con sus carencias y defectos, es tener la valentía de coger las riendas de nuestra vida y poder negarnos a todo aquello que no nos hace felices.

Cuántas veces nos han preguntado, o incluso nos hemos preguntado a nosotros mismos a que aspiramos, hacia dónde llegan nuestras metas y nuestros sueños. Pero realmente todas aquellas respuestas se dirigen hacia el mismo destino, y es que la totalidad de la humanidad aspira a ser feliz.

Pero, ¿Qué significa la felicidad? ¿Dónde podemos encontrarla? Y sobre todo ¿hasta dónde podemos llegar para conseguirla? ¿Pero alguien se ha parado a pensar si realmente lo que hacemos diariamente nos hace felices?

Pasamos toda una vida luchando por un futuro, ansiando tener todo aquello a lo que hemos aspirado, descuidando, que nos estamos olvidando de disfrutar y ser felices.

Incluso nos han obligado a creer cuáles son los estándares de la felicidad. A comprarla en lugar de vivirla. A creer que a todo el mundo le hace feliz las mismas cosas, y ese pensamiento es totalmente incierto.

También nos han hecho creer que la felicidad la encontramos rodeándonos de muchas  personas, pero honestamente, sentirse solo con uno mismo es el claro reflejo de un malestar personal. Pues como dijo Mark Twain “la peor soledad es no sentirse cómodo contigo mismo”

Nadie nos dijo nunca donde encontrar la felicidad, pues, podemos empezar a buscarla en nosotros mismos, empezar a querernos y a cuidarnos.

Sandra GONZÁLEZ
Escribe quinzenalment

 


REDACCIÓ5 Octubre, 2020
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Una vez le dije: es tan fácil borrar las palabras y los hechos que escribo cuando relato historias frente al papel. Mis personajes también sienten y padecen, sufren y son los reyes de las malas decisiones. Pero yo los controlo, con un solo botón elimino todos y cada uno de aquellos instantes, momentos, recuerdos…  ¿ya está? ¿Así de fácil? ¿Pero quién puede controlar mi vida? A veces no es tan fácil ser director de nuestras acciones, o guionista de nuestras palabras, y mucho menos de los actos de las personas de nuestro entorno. El mundo real, es una continua operación de matemáticas y yo soy más de letras.

Soy de esas personas que parece que se lleven bien con la piedra, esa piedra que siempre dicen que el ser humano tropieza una y otra vez. Pues ahí estaba ella, frente a lo que pensaba que sería el amor de su vida, y que resultó ser su anulación total como mujer.

Llegados al punto de ni siente ni padece, se plantea si fue un amor o una obsesión. Es ridículo el hecho de pensar que puedes llegar a enamorarte de la persona más nociva que has conocido. Pero… no se puede odiar a alguien que no amas, ni dominar a quien no conoces.

Obviamos a las personas y a su alma para únicamente enamorarnos de sensaciones, de instantes… ¿Quién eres realmente? Dicen que lo oculto es aquello que más nos atrae, lo desconocido, el miedo. Pero no olvides que la curiosidad mata.

¿Se arrepiente? cuántas veces ha contestado que jamás se arrepentiría de nada que haya marcado su vida, pues si eliminase algún hecho, estaría haciendo desaparecer a si misma. “Soy lo que he vivido y lo que me has enseñado”. Amor y desamor al fin y al cabo se escriben igual, a la misma vez que somos capaces de hacer pedazos todo aquello que tanto hemos cuidado…

Si, ella fue una mujer maltratada, y no se arrepiente de ello.

(Fragmento del libro “crecer deprisa” Autora Sandra Gonzalez)

Sandra GONZÁLEZ
(Escriu cada 15 dies)


REDACCIÓ14 Setembre, 2020
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Es tan complicado llegar a conocer a una persona, pues, te pasas la vida entera tratando de llegar a su interior.  ¿Cómo de complejo puede suponer el conocer a las personas que nos rodean?

Parece que la sociedad vive bajo la necesidad de agradar a todo el mundo. Me parece agotador tener que lidiar con nuestras inseguridades con el fin de aparentar ser o tener una vida totalmente distinta a lo que somos, sentimos o tenemos.

Nos hemos convertido en una sociedad consumista, basada únicamente en las apariencias, utilizando el consumo y el capitalismo como suplemento de nuestro malestar.

Un parche que hemos comprado, sin darnos cuenta del peligro que supone el exceso de la dependencia a este estilo de vida, al que la mayoría de personas que lo practican, ni siquiera se lo pueden permitir.

El mayor foco de engaño se encuentra tras las redes sociales (RRSS), donde, sobretodo los jóvenes, tratan de crearse un estilo de vida en el que se sientan aceptados, pero radicalmente opuesto a la realidad. Y es que, la oscura realidad de toda esta generación artificial son las propias redes sociales, donde se crean usuarios y perfies, mayoritariamente falsos, a los que los jóvenes puedan idolatrar e imitar. Personas que idealizamos y a las que intentamos parecernos, olvidando así, lo que realmente nos gusta, a lo que aspiramos, de dónde venimos, pero, sobre todo, quienes somos.

Es ahí donde el consumismo y las apariencias enlazan un tóxico vínculo, cuando cada vez es mayor la necesidad de querer crearnos una falsa vida, bajo el inconformismo con nuestro verdadero yo, la baja autoestima y la necesidad de encajar con el prototipo establecido en la sociedad. Zygmunt Baumant dijo: “Esa es la materia de la que están hechos los sueños, y los cuentos de hadas, de una sociedad de consumidores: transformarse en un producto deseable y deseado”.

Sandra GONZÁLEZ
Escribe en este espacio quinzenalmente

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REDACCIÓ2 Setembre, 2020
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La salud mental y la existencia de diversos trastornos o alteraciones en la mente humana es un tema que a la gente no le gusta hablar, más bien me atrevería a decir que impone un respeto.

La inmensa capacidad de la mente humana es algo maravilloso, pero que, a su vez, puede jugarnos una mala pasada. Malísima.

Cuando escuchamos la palabra trastorno, nos vienen a la mente enfermedades psicóticas como la esquizofrenia o trastornos anímicos como la bipolaridad.

Es un error, pues hay infinidad de alteraciones en la mente que pueden afectar a nuestros pensamientos, sentimientos, estado de ánimo y comportamiento, que pueden comenzar a tratarse con la identificación de este problema.

Soy partidaria de normalizar el trastorno y no etiquetar a las personas como enfermas, ya que no somos conocedores de su origen, y lo asociamos únicamente a problemas genéticos, hereditarios o incluso por el consumo de sustancias tóxicas o alcohol. Cuando, en realidad, la base de una enfermedad mental se manifiesta en una combinación de factores psicológicos y sociales. Como puede ser el estrés, un episodio de pánico o de violencia, la conducta, las emociones…

Y a raíz de todo esto, se desarrollan enfermedades como la depresión, la paranoia, la ansiedad, el trastorno de personalidad, trastorno de la alimentación, dependencia…

Hay una inmensa variedad de trastornos y personas que los padecen sin saberlo. Y corren el riesgo de convivir con un constante malestar interno sin saber el motivo de este.

Nos hemos acostumbrado e incluso obsesionado, con cuidarnos físicamente. Cuando la clave para el bienestar absoluto es cuidar nuestra paz mental.

Marco Aurelio dijo “la felicidad de tu vida depende de la calidad de tus pensamientos”

Es entonces donde empezamos a enfocar un camino hacia donde queremos dirigirnos, hacia donde volar.

El ser humano, a lo largo de su vida, experimenta una infinidad de sensaciones y sentimientos, que tienden a manifestarse de manera positiva o negativa.

La clave para gestionar dicha sensación es conocerse a uno mismo, aceptarse y establecer una relación con tu yo más profundo, para crear una experiencia única y satisfactoria en cada uno de los momentos de nuestra vida.

Sandra GONZÁLEZ
(publica quinzenalment)

 


REDACCIÓ1 Setembre, 2020
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Ja s’ha acabat el mes d’agost i amb ell s’ha posat punt final a les vacances – atípiques – de milions d’espanyols, condicionades per la pandèmia del coronavirus. Amb l’arribada del setembre, la roda comença a girar i pràcticament tot comença a agafar la normalitat necessària.

Sandra González

El nostre digital també torna a l’actualitat informativa i presenta algunes novetats. Una d’elles és la nova secció ‘Punto de encuentro‘. Es tracta d’un apartat d’opinió, en castellà, on la jove Sandra González, de 19 anys, compartirà, quinzenalment, la seva perspectiva sobre diferents temes socials.

L’objectiu és que el seu punt de vist esdevingui un referent, a través del llenguatge i de visió, per als més joves, els quals, sovint, no troben resposta a les seves inquietuds o dubtes.

Sandra González, fent servir un llenguatge més juvenil, desimbolt i informal, espera que la seva secció es converteixi en el punt de trobada per a algunes reflexions interessants i aconsellables pel jovent.

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